CARLOS ARISTEO RODRIGUEZ. UN INTERIOR DE ALMAS
Veracruz un estado que se distingue por su diversidad cultural y artística, quizá su extensión única que va centro sur a norte del país lo haga compartir una situación geográfica única que lo ha llevado a desarrollar identidades tan diferentes entre si, en un sólo estado de la república mexicana. Actualmente esto se ve reflejado por el interés y entrega de los diferentes promotores culturales, artistas y particulares, que han puesto su empeño y dedicación en la preservación y difusión de las tradiciones y el arte.
“Todo este círculo me apasionó demasiado, he hizo que me interesara desde pequeño en el arte, tan es así que a los 5 años realicé una serie de esculturas en bronce a la cera perdida, las esculturas son de Dragón-Ball. Este trabajo lo adquirió el Lic. Luis Ramón Morales Corona, uno de los mejores curadores de arte en la Ciudad de México.” Carlos piensa que para crear arte, el artista tiene que ver, sentir y palpar el arte, pues “el arte vine del arte”.
A Carlos le apasiona pintar el realismo que le inspiran los rostros de las personas.
“...trato de que en cada uno de mis retratos sean de personas humildes, sencillas, y naturales, en el caso de las mujeres, me interesan esos rostros sin maquillaje, es importante esto porque nuestras caras tienen mucho que contar. Es un increíble reto pintarlas, transmitir es muy difícil pero no es imposible, por eso es que me apasiona, siempre es un reto nuevo pintar a cada persona ya que todos son modelos diferentes.”
Carlos desea transmitir con sus pinturas las miles de historias que pueden existir en México, desea transmitir historias reales, las que las personas no quieren contar, las que van más allá de las apariencias, por eso retrata a la gente lo más real posible, logrando captar lo que en ese instante están viviendo, pensando o sintiendo, de esta manera inmortaliza personajes de diferentes lugares.
“Pinto mujeres en su mayoría porque me parece son los seres que más tienen que contar, estoy seguro que en el transcurso de su vida viven muchas cosas que nunca le contarían a alguien.”
En 2013 realizó una pieza titulada "Veracruz visto en el 2013", la obra expone una cabeza enrollada y colgando de una cuerda roja, y responde a toda la violencia desatada en esa época. Cree sinceramente que no debe por ningún motivo mantenerse al margen de su realidad.
“Mi proceso creativo inicia con la creación de mis bastidores, al saber lo que quiero plasmar, empiezo a buscar el modelo indicado muchas veces saliendo a las calles a buscar personas que me llamen la atención, que me llenen y me hagan pensar en las cosas que les pudieron haber pasado o algunas veces pienso en que quiero pintar por ejemplo Un homenaje a Edvard Munch pues busco a alguien que quiera posar gritando, para así hacer mi versión del grito, una vez que tengo la fotografía del modelo es cuando surge el verdadero reto, pues tengo que separar cada tono de piel, cada detalle, para empezarlo a trazar sobre el lienzo. Mientras lo trazo voy pensando en porque lo estoy haciendo, que haré de fondo, si lo haré con oleo o con acrílico, sí simplemente será un lápiz sobre tela… después solo empiezo a pintarlo, aquí sucede algo extraño, empiezo pintando bien y finalizó todo embarrado de brazos, pies, a veces hasta de la cara... pero todo esto es necesario para poder no solo transmitir las expresiones de los rostros, sino también lo que yo siento mientras lo estoy pintando.”
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Por: @Brenda_Martz